Nos encontramos en el momento decisivo del curso. Es la hora de mirar hacia delante y consolidar las mejoras que tanto a nivel de grupo como individualmente hemos ido logrando.
No es el momento ni de tirar la toalla, ni de seguir igual. Debemos dar la medida de nuestras posibilidades.
Ayoze ha tenido una notable mejoría reconocida por los dos profesores del taller y es necesario que consolide estos progresos. Ya sabe lo importante que es cada momento. Un mal momento podría tirar por tierra todos los progresos. Un buen trabajo en el que estamos contentos se puede perder por un instante de mala cabeza.
Nosotros apostamos por su mejoría. No te defraudes, lógralo. Serás más feliz.
Santiago: una llamada de atención a tiempo es la mejor medicina para el éxito. Nos ayuda a poner los pies en el suelo y a poner el punto de mira en el futuro que deseamos hacer realidad. Nadie duda de tu mejoría, no obstante, debes marcarte metas algo mayores y ser una buena influencia para el resto del grupo. Sabes que eres importante para tus compañeros y tienes que tirar de ellos hacia delante.
Gregorio: ha sido una de las mejorías destacables en esta evaluación. Pasó de ser un cero a la izquierda, a sentirse orgulloso de su trabajo. Ya puede comerse el plato de comida diario con la conciencia de que se lo está mereciendo. Es significativo el comprobar como al sonar el timbre que da por finalizada la clase, sigue trabajando para acabar su trabajo. De seguir así, a buen segura que le pagaremos a final de mes y, lo que es mejor, le pagarán puntualmente todos los meses de su vida.
Eugenio: personalmente nos encontramos muy orgullosos de su evolución. Se implica a diario en sus tareas y logra acabar todos sus trabajos. Ha tenido notables progresos en su capacidad de concentración en el trabajo. El otro día, leyendo en la hora de tutoría, nos sorprendió lo bien que lo hizo. Se nota su trabajo.
Carlos: si fuera otro alumno, hasta estaríamos contentos, pero en su caso no lo estamos. Consideramos que su objetivo mínimo debe ser titularse en E.S.O. Y ese es el problema. Con su actual estado, no lo logrará. Nosotros creemos firmemente en sus posibilidades, pero hay cuestiones que únicamente él las puede hacer. Tú decides cuál quieres que sea tu futuro. Nosotros sólo podemos ayudarte a que lo logres y apostar por ti. Tuya es la decisión, nuestra ayuda la tendrás en la medida que apuestes por lograrlo.
Aitor: no habíamos tirado la toalla, porque nunca lo hacemos, pero francamente estábamos poco satisfechos con lo que habíamos logrado hasta el momento. Sin embargo, desde hace tres semanas, la situación ha dado un vuelco espectacular. Ahora mismo estamos bastante contentos con su trabajo y cambio de actitud. Sólo esperamos que la mejoría siga y logre culminar con éxito el curso. Y para esto, las notas son una anécdota, lo verdaderamente importante es su actitud y sus ganas de mejorar. Ánimo y a conseguirlo.
Alexander: es una pena que uno de los alumnos con mayor madurez para algunas cosas, se conforme con sacarse tan poco provecho. Debe asistir a clase con regularidad, trabajar a diario y ser el mismo de una vez. No logrará cobrar a final de mes sino tiene un cambio radical de actitud. Sabemos que puedes, pero eres tú quién debe aclarar sus ideas y saber que es lo que quieres lograr.
Carolay: cuando viene tenemos pocas cosas que objetar. Cumple con su trabajo y molesta bastante poco. El problema ahora mismo, lo que nos tiene realmente preocupado don sus faltas de asistencia en este segundo trimestre. Esperamos que esta situación cambie radicalmente en el tercer trimestre. Puedes aprobar y sabes lo que tienes que hacer para lograrlo. Tienes que hacerlo, no hay otra solución. De nada vale trabajar bien si faltas mucho al trabajo. No faltes, cobrarás a final de mes y ya nunca más serás algo distinto a una persona que vale mucho.
Francisco: ahora mismo es nuestra asignatura pendiente. Se acaba de incorporar al taller, y aún no hemos logrado que se integre en la dinámica del grupo. Sabemos que es buen chico, y que en la medida en que se lo proponga, podrá sentirse más orgulloso de sí mismo.
Cristo: es como el Guadiana, aparece y desaparece. Hay momentos en los que apuntas unas grandes posibilidades y personalidad, y otros en los que se desvanece influenciado por los demás y haciendo gracias para que los demás puedan acabar su trabajo contentos, pero impidiendo que tú los termines. Los demás cobran a final de mes. Tú aún no. Y es una pena, porque sabes cuales son tus puntos fuertes, pero sólo los estás aprovechando a ratos. Se cobra por el mes entero, y tú puedes tener un buen sueldo. De ti depende.
Miguel Ángel: técnicamente ya no está en el taller, pero lo consideramos un alumno más del mismo. Ha dado pasos para delante y no es el momento de asustarse ante los primeros problemas. Aclárate tus ideas, responsabilízate de tus acto y no busques responsables en los demás. Puedes conseguirlo, debes lograrlo. Es tu decisión. Actúa en consecuencia.
En definitiva, esperamos que este tercer trimestre sea el de la consolidación de todos los progresos que hemos hecho tanto como grupo como individualmente. La meta está ahí.
La alcanzaremos entre todos como un equipo que somos.
Ánimo y a la faena.
martes, 24 de marzo de 2009
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